La decoración de papeles al engrudo es una técnica antiquísima que se conocía ya en los albores del siglo XIII. Se desarrolló en Alemania y fue la forma de decoración que se impuso en las encuadernaciones de calidad hasta bien entrado el siglo XVIII. 

Por razones desconocidas, a partir de entonces cayó desuso y prácticamente desapareció hasta mediados del siglo XX, cuando resurgió con mucha fuerza en el mundo anglosajón, siendo en la actualidad una de las técnicas más apreciadas y preferidas por encuadernadores de todo el mundo.

Mención especial merece don Antolín Palomino, en lo que atañe a España, que a mediados del siglo pasado contribuyó significativamente a su popularización, convirtiéndolo en una de las señas de identidad de sus trabajos.

En el taller descubriremos que se trata de una técnica especialmente adecuada para trabajar con niños, tanto por su sencillez como por sus posibilidades creativas, y que, además, resulta sorprendentemente divertida y permite crear papeles de gran belleza. ¡Ya veréis que es casi imposible que quede mal! 

Al final de la sesión aprenderemos a confeccionar una sencilla libreta para poder repetirla con nuestros papeles… una vez secos.